Sólo utilizando un mueble auxiliar para guardar las bebidas, vajillas o cristalería, se puede delimitar el espacio con algún elemento como un cuadro o simplemente darle personalidad con algún retrato, lámpara o accesorio. Además, podrás utilizar una o dos sillas si el espacio lo requiere. Mira estás ideas y emplea la que más se ajuste a tu gusto o presupuesto.
Para espacios reducidos sólo necesitamos una bandeja. A casi todos nos cabe en un lugar de casa una bandeja, es la solución más económica, sencilla y práctica para crear un espacio de mini bar. Aunque es una opción simple, se puede destacar con alguna decoración especial, luz, paredes pintadas o algún adorno.

Para exteriores: Es una opción muy interesante para las barbacoas y para tener de forma accesible vasos y utensilios para preparar los cócteles. Aun así, no te recomendamos que dejes las botellas de alcohol guardadas afuera porque con el calor se estropearán.

Para los amantes del vino, te encantará tener un rincón en casa dedicado a cultivar y disfrutar del placer de abrir esa botella que has estado guardando durante tanto tiempo. Poder disponer en el mini bar de una nevera es un lujo, puedes instalarla fácilmente con un cambio armónico en el área.

Rústico: un estilo más campestre para los amantes de autóctono y de líneas más sencillas, puede servirte tanto para interior como para exterior.

Utilización de una camarera: Es la opción más usual y práctica, ya que la puedes mover de un lugar a otro a tu gusto cuando quieras, es también una opción muy vistosa, funcional y decorativa. Y lo mejor de todo es que hay para todos los gustos y tipos de decoración, elegantes, industriales o más sencillas.
